Como cuando escuchaste esa canción,
la recitaste, la bailaste, la memorizaste.
Como un bocado de un postre en tu boca,
lo saboreaste, lo deseaste, lo lograste.
Aquellos amaneceres que admiraste,
la alegría que causó en ti,
esas ganas de vivir.
La energía en el estómago,
en mi espacio estrellado,
con lunares, con tus besos en tubos de ensayo.
La conquista de tus manos,
tu sonrisa de medio lado,
el brillo de tus ojos.
Mi lugar, sin duda, es a tu lado.