Recordé que te gustaban mis uñas largas,
así que las corté.
También recordé que te encanta mi cabello suelto,
y hoy lo agarré.
Recordé que te gusta mi sonrisa así que lloré.
Y ese vestido preferido, hoy lo quemé.
Debes tener cuidado de llamar la atención de un escritor. Ellos absorberán tu belleza, la plasmarán y su musa serás. Nunca, pero nunca, morirás. No digas que no te lo advertí.
miércoles, 16 de julio de 2014
miércoles, 2 de julio de 2014
Lobo feroz
Ella se vestía lentamente.
Él se iba sin desayunar.
Ella lo esperaba pacientemente.
Él solo la quería abrazar.
Búsquedas infinitas con
miedos más grandes que el sol.
Se dieron muchas oportunidades,
todo lo valía el amor.
Margaritas sin deshojar,
casas sin decorar.
Sonrisas tan tristes
como las mañanas grises.
Y como la tranquilidad del mar
ella volvía a él.
Como la agresividad de la oscuridad
él la esperaba sin más que dar
que un par de besos y una sonrisa mordaz.
Él se iba sin desayunar.
Ella lo esperaba pacientemente.
Él solo la quería abrazar.
Búsquedas infinitas con
miedos más grandes que el sol.
Se dieron muchas oportunidades,
todo lo valía el amor.
Margaritas sin deshojar,
casas sin decorar.
Sonrisas tan tristes
como las mañanas grises.
Y como la tranquilidad del mar
ella volvía a él.
Como la agresividad de la oscuridad
él la esperaba sin más que dar
que un par de besos y una sonrisa mordaz.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)