domingo, 22 de junio de 2014

Medicamento

Te quiero sentir en cada parte de mi ser,
en cada célula,
en cada pieza,
cada movimiento,
cada articulación.

Como droga que pasa por mis venas,
se ahoga en mi sangre,
se queda en mi saliva
y muere en mi respiración.

Como frío que recorre mi cuerpo,
me eriza la piel,
me adormece,
me deja sin vida
y me revive en una canción.

viernes, 13 de junio de 2014

Sacando cuentas

Y si me pongo a sacar cuentas diría que tengo:
1, 2, 3 días a tu lado.
8, 9 y 10  aún me parece extraño...
13, 14, 15 vaya lotería la que me he ganado...
20, 21, 22 muy pocos lo han logrado.
33, 34, 35 eres mi sueño más anhelado y
36, 37, 38 sueños he tenido, en todos te busco en mi brazos.

Y tengo 50 amaneceres junto ti en un listado,
archivados, recopilados y prontos a estar pagos.

Y por cada "te extraño" te regalo tres besos, el sol y el universo.

Por cada sonrisa te doy un poquito de mi vida.
Por cada llamada te regalo mis días.
Por cada abrazo que te guardes te haré cosquillas.

Luego de tanto me di cuenta que todo lo que te ofrezco, todo lo que me das,
todo aquello que ocultas y que me prometes dar es: incontable, infinito.

No me alcanzan las cifras y  por eso no me guardo las sonrisas
que me provocas cada día, que me hacen sentir plenamente querida.

Sin duda alguna estar contigo es lo más hermoso de mi vida.
Nadie nunca me dijo cuán feliz sería.
Y te recordaré cuánto te quiero todos los días de mi vida.

jueves, 12 de junio de 2014

La lluvia me dijo

La vida se nos va
por donde nuestros puntos débiles están:
Por los sueños, por el cuello.

Sólo te pido que si algún día huyes de mí,
espero que huyas hacia mí.

Te recordaré que me deshojaste como árbol
y apenas era primavera,
ese era mi mayor grado de belleza.

Todo esto es amor,
es territorio prohibido,
es adicción.

martes, 3 de junio de 2014

Lista de deseos

No quiero tus momentos de cordura,
prefiero tus ataques de locura.
No quiero tus sobrias palabras,
quiero las frases ebrias de sinceridad impregnada.

Quiero tus risas nerviosas y abrazos espontáneos.
Tus pensamientos filosóficos, tus miradas matadoras,
tus sonrisas de medio lado y tus susurros,
que poco a poco me comentan lo que va pasando.

Quiero que pronuncies mi nombre una y otra vez,
hasta llegar al punto de olvidar quién soy.
Y que con tus besos me recuerdes dónde estoy.

Quiero tus "buenos días" y
tus "buenas noches" como medicamento toda mi vida.
Por último quiero perfumarme con tu aroma, todo el día.
Y dedicarme a sacarte unas cuantas sonrisas atrevidas.

Porque a mi cuerpo, alma y ser les hacía falta tu piel,
tus pies y todo eso que vale por diez.

En fin, ésta es mi lista de deseos.